viernes, 9 de marzo de 2012

Full moon [ Luna llena ]


Salgo del encierro. De esa construcción de vidrio, y me paro en seco. En frente mío está la luna, gigante y amarilla, como si sólo estuviera para mí, por algo.
Creo adivinar lo que quiere, y no me sorprende. Recuerdo al tipo, al ( para mí ) anciano, con el que una vez jugué, hace un tiempo. Sé que está arriba, en los vestuarios de dónde vengo. Me doy cuenta de que últimamente nos vemos más seguido, y se me hace que no es casualidad.
Me pregunto si hoy sera la noche en que se decida. La noche que baje del auto y me mate, por aquel día en el cual lo exité o por cualquier otra cosa.
Repito que esa luna no está ahí por nada, y comienzo a caminar, un tanto entusiasmado. Me parece una buena idea coronar este día de esa manera. Yo contra él, con la luna como único testigo. Yo contra todo lo que me pasó hoy; contra ese gobierno que me acusó de pedófilo ; contra esa transacción fállida.

La calle es más bien oscura. La luz de un auto se proyecta e imprime mi sombra en el suelo. Me pregunto si es él, si llegó la hora de pagar por todo lo que hice mal. Me imagino un cuchillo o una pistola, empuñados por esos ojos un poco tristes, un poco locos. Me voy haciendo a la idea. Lo idealizo como mi rival, como el responsable de todas las cosas que no salieron bien, como el que me mantiene en este estado de somnolencia, atrapado en este pueblito ficticio.
La suerte está echada, me digo. Finalmente lo que tanto querías. Una acción trascendental. Un suceso que te cambie casi sin tiempo a darte cuenta. Ya sea que te mate, o que vos lo mates a él, tu vida va a ser diferente.
Desde atrás las luces se aproximan, el ruído se acentúa. Veo la luna, y parece más frágil que nunca. Pero el auto pasa, y se pierde en la penumbra de la esquina. No era él.

Me doy cuenta, una vez más, que mi vida, mi muerte, mi felicidad o tristeza estuvieron de la mano de otra persona. De cualquier persona menos de mí.
Tal vez si mi jefa me diera el trabajo que quiero; tal vez si el jurado decide aceptarme en la universidad ; tal vez si ese chico me quiere devolver la mirada; tal vez si me hermano quisiera pasar más tiempo conmigo.

La luna también se esconde, detrás de las nubes. Ya sea que hubiese tomado el camino de la izquiera, o el de la derecha, por más que le hubiera dirigido la mirada de nuevo, el tipo jamás iba a venir detrás de mí, a matarme.

Dame más vino, que la vida es nada.

3 comentarios:

  1. Suena a q no estás viviendo. Feo, feo, feo... Viví y dejá de transcurrir aunque estés es España.
    Besos!

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  2. ¡Cuánta conciencia! ¡Cuánta inconSciencia...! dudas, arrepentimientos, prosa poética expresando miedos; miedos infundados, sin sentido, para rehusar la responsabilidad propia; los otros, siempre los otros, no son sólo un referente; sino el "conducente".

    Vive, como dice Luck, pero me temo que el se queda en un simple sobrevivir inconSciente, vive en verdad; los miedos son la consecuencia de no andar en ella.

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  3. Lu : suena a eso, lo sé. También pasa que cuando me dan ganas de escribir es cuando me sientó mal. Es como una forma de sacarme la mierda de encima.
    Supongo que tengo idas y vueltas. A veces estoy bien, a veces no tanto, pero intento mejorar, intento vivir :)
    gracias por pasarte.


    Betu:parece, tal vez, que soy un tipo que se sienta a esperar y le echa siempre la culpa a los demás, pero te aseguro que no soy así.
    Simplemente, como tipo social, reconozco la importancia que tienen en la vida cotidiana.Como se van conformando, como interactuan,los rituales que eligen, las formas de hablar...todo conduce hacia vos, para bien o para mal.
    Un abrazo, y gracias por leer che.

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